Grúas Polisol, S.A., fue fundada en 1961 por José Nieto Brugos, “El Poli”, que empezó con mucha ilusión y pocos medios. Todo comenzó con una pequeña grúa para auxilio en carretera, fue un LAND ROVER, al cual le pusieron por nombre “La constancia en carretera” ya que su principal misión era la de auxilio de los automóviles averiados o accidentados. Este vehículo, actualmente, se encuentra en nuestras instalaciones conservándolo como vehículo insignia de la empresa.

Posteriormente, y viendo la necesidad del auxilio de vehículos de gran tonelaje, construyeron una grúa artesanalmente, diseñada por el hijo mayor de José Nieto y fabricado en talleres Huertas de San Antón.

La grúa se montó en un camión marca LANCIA comprado a la empresa ETASA; que se dedicaba al transporte de cisternas de butano, empleándolo, además de para lo que fue concebido, para trabajos en la industria. Viendo la gran demanda de trabajo, se pensó en adquirir una nueva grúa, que sería montada sobre un camión BARREIROS saeta 35, pero, al comprobar la poca estabilidad de este camión, se cambio a otro de más peso para ganar en estabilidad. Uno de los trabajos más relevantes realizados por esta grúa fue la plantación de 3,002 palmeras en el campo de golf de La Manga, las cuales aún podemos ver en la actualidad.

Tras unos años José Nieto Burgos “El Poli” con la ayuda de su esposa, Juana Martínez Suárez, y de sus hijos Ángel, Juan y José, y mucho trabajo. ”El Poli” continuó con la labor de llevar a buen puerto la recién creada empresa.

La década de los 60 fue una época de lucha y sacrificio, pero el desarrollo industrial de Cartagena, con una fuerte demanda de grúas móviles y con un sector aún sin explotar en la comarca, nos motivó a emprender esta actividad empresarial pionera en nuestra región.

Durante la década de los 70 se hicieron importantes inversiones en instalaciones, personal y maquinaria para cubrir las necesidades que Cartagena y sus empresas demandaban. En esos años contaban con cinco máquinas (Land Rover, Lancia, Barreiros, Atlas y Leyland Búffalo). Los talleres y oficinas estaban situados al principio de la avenida Pintor Pórtela, Junto a la estación de Renfe. Sus principales trabajos se desarrollaron en empresas cuya necesidad de grúas de mediano y gran tonelaje la hacía imprescindible, como, por ejemplo, Peñarroya, Acevesa, Explosivos Río Tinto, Española del Zinc, Repsol, etc. Uno de los trabajos significativos fue la participaron en el montaje de la cámara hiperbárica del Santo Hospital de Caridad. Corría el año 1974.

Tras el requerimiento de la empresa nacional Bazán, por su necesidad de desmontar ciertas máquinas del taller de herreros, la empresa optó por la adquisición de una grúa de 35 TM, la cual, en su momento, fue la más grande de la comarca, llegando a realizar trabajos como montajes de vigas en puentes, las cerchas de cine del colegio Maristas, etc.

Una empresa cartagenera (Martínez Parra) solicita una máquina concreta cuyas características, en cuanto a movilidad y a andar con cargas suspendidas para realizar un trabajo de larga duración en la central nuclear de Almaraz, obliga a adquirir un modelo de grúa todo terreno Grove RT 58 que, a su vez, fue empleada en la construcción del pantalán del carenero de la empresa nacional Bazán. En esta época nuestra empresa se trasladó, para poder dar cabida a toda la maquinaria adquirida, a un local situado en un barrio cartagenero (Las 600), adecuando un antiguo cine como cocheras, cuya parte de arriba se habilitó como vivienda donde residieron José, su esposa Juana y sus hijos.

A principios de los años 80, Grúas Polisol pasó a ser S.A. También a principios de esta década, se inaugurarán las nuevas instalaciones de Pintor Pórtela, n.º 48, una nave de unos 3 000 m² que, en su día, se pensó que sería la nave definitiva. Pero el tiempo, y la nueva adquisición de maquinaria, dejó ver que no sería así y se compró una parcela de   10.000 m² en el actual polígono industrial Cabezo Beaza, con miras de una futura nave donde dar cabida a todas las máquinas.

A mediados de esta década se adquiere, a industrias de Betoño (IBESA), un lote de grúas comprendidas entre las 10 y 35 TM. También, por necesidades estratégicas, se crean dos sucursales, una en San Pedro del Pinatar y otra en La Unión, llamándose Grúas Sol y Grúas del Sureste respectivamente, contando con instalaciones y maquinaria suficiente para abastecer el mercado de dichas zonas.

En la década de los 90, la empresa es requerida para realizar trabajos en la construcción de la EXPO 92, desplazando a la zona un equipo de máquinas y personal para poder atender a la demanda de maquinaria solicitada.

Aproximadamente a mediados de esta década, se crea otra empresa llamada Grubo, S.L., siendo la primera empresa de la región en adquirir 2 bombas de hormigón. Con esta empresa se llevará a cabo la construcción de varios centros comerciales Pryca, en Madrid, Valencia, Cartagena, etc.

Aquí, no hay que olvidarse de la crisis mundial que se cebó especialmente con Cartagena. Grúas Polisol no escapó de esta crisis. En esta década, Juan Nieto Martínez apostó por la compra de las acciones a sus hermanos y, asípasó a hacerse cargo de la gerencia de la empresa junto a sus tres hijos: Juana, José Andrés y Ángel Nieto Ros.

En enero de 1995 la empresa se traslada a la parcela del polígono industrial que, en un principio, era solo eso, una parcela cercada, pero sin naves. Las oficinas eran casetas provisionales. Todo se fue haciendo poco a poco, primero una nave de unos 4.000 m², después otra un poco más pequeña y por último las oficinas. Instalaciones que, en la actualidad, cumplen todos los requisitos necesarios para la conservación y el mantenimiento del parque actual.

A mediados de los 90, se crea la empresa Tres Pejuan y a finales de esta década, se firman contratos en exclusividad con empresas de importancia, como por ejemplo Repsol Petróleo, Bazán (actualmente Navantia), Enagas, etc.

El 22 de enero de 1988 fallece José Nieto Burgos a los 73 años. Hasta el último momento de su vida no abandonó su querida empresa, acercándose casi todo el día hasta sus instalaciones para poder ver orgulloso el resultado de tanto esfuerzo de toda una vida dedicada a ella, y ver como su hijo y sus nietos la llevaban a un futuro próspero.

En la actualidad Grúas Polisol sigue en el sector de la elevación, transporte y auxilio en carretera después de casi 60 años en servicio permanente las 24 horas y 365 días al año.